1. Apuesta por los ingredientes que te funcionan
Normalmente a las pieles sensibles les funcionan los siguientes ingredientes: aloe vera, niacinamida, ácido hialurónico, zinc, ceramidas, coenzima 10, ácido láctico, PHAs, té verde, centella asiática y cafeína. Estos son más que suficientes para mantener tu piel luminosa, hidratada, humectada y protegida.

2. Evita las fragancias y los alcoholes secantes
Sí, es increíble ponerte un producto que huele delicioso, pero las fragancias, al igual que los alcoholes secantes y los aceites esenciales, irritan, sensibilizan e incluso provocan alergias. Hay varias formas de asegurarte de que tu producto no tenga fragancias:
- Checa la lista de ingredientes, si lees “perfume / parfum”, “fragancia / fragrance”, “alcohol desnaturalizado / denatured alcohol” “etanol / ethanol”, “metanol / methanol” “alcohol etílico / ethyl alcohol”, alcohol isopropílico / isopropyl alcohol”
- Apuesta por productos dermatológicos o dermocosméticos que son aptos para pieles sensibles y están formulados sin fragancias; normalmente viene anunciado en el empaque.
- En caso de duda, analiza los ingredientes en skincarisma.com :)
