Cuando aplicas un producto en capas, se le llama layering. Esta técnica se ha vuelto la obsesión de la industria del maquillaje por su capacidad de construir, personalizar y transformar el maquillaje. Normalmente se hace con el corrector (para eliminar las imperfecciones) o con las sombras para lograr un look complejo. Esta vez, las celeb makeup artists, Nikki Wolf y Mary Phillips, quieren que hagas el layering con tu iluminador.
Técnica 1: Construye las texturas
Nikki Wolf, le explicó a ELLE Australia que una de las claves para que esta técnica tenga un acabado dewy y luminoso es el orden en el que aplicas los productos. Primero la fórmula líquida o cremosa y después la fórmula en polvo.
1. Aplica el highlighter líquido sobre las zonas de la cara donde quieres la luminosidad. Utiliza una brocha de punta delgada para hacerlo con precisión.
2. Sella el resto de tu complexión con unos polvos fijadores . Esto prolongará la duración de tu maquillaje y asegurará que el brillo se fije únicamente en las partes donde lo quieres.
3. Por último, aplica el highlighter en polvo sobre las zonas donde aplicaste el líquido. Hazlo con los dedos o una brocha pequeña para que la transición de producto sea exacta.
Técnica 2: Construye los tonos
Mary Phillips es la makeup artist detrás de los beauty looks de Kendall Jenner , Hailey Bieber y Priyanka Chopra . Ella le recomendó a ELLE Australia intensificar la luminosidad utilizando fórmulas líquidas con tonos diferentes. Al utilizar fórmulas líquidas, el acabado de este look es mucho más dewy y glossy de lo normal.
1. Empieza con una bruma facial que contenga un ligero acabado shimmery casi transparente.
2. Sigue con un iluminador metálico y shimmery.
3. Termina con un highlighter que sea un híbrido entre blush e iluminador.
ELLE CONSEJO:
Si tienes miedo de que tantas capas hagan que tu maquillaje se vea cakey y falso, tienes que tener tres cosas en cuenta.
1. Todas las capas que apliques tienen que ser delgadas y finas. Esto aplica para todos los productos, no solo el iluminador.
2. Prepara bien tu piel y utiliza un primer que permita que todo se adhiera a la perfección.
3. Cuida el nivel de cobertura que aplicas. Una cobertura ligera y sencilla crea un efecto natural.