Es de lo mejor que hay cuando se trata skincare. No solo porque deja la piel glowy, sino porque es un poderoso antioxidante. Ayuda a inhibir los daños de los rayos UV ( igual tienes que usar FPS ), las agresiones de la contaminación y la oxidación celular. Esto significa que a parte de darte una luminosidad envidiable, funciona como un ingrediente anti-edad.
También conocido como vitamina A, el retinol es un poderoso antioxidante que combate los signos de la edad y del acné. Todo esto lo logra gracias a que estimula la regeneración celular y la producción de colágeno . Pero ten cuidado, porque es tan potente que tienes que empezar a usarlo poco a poco (cada 15 días) y únicamente por las noches en lo que se adapta la piel. También tienes que fortalecer los cuidados con un bloqueador de alto espectro para no sensibilizar la dermis.
Conocido en inglés como castor oil, este aceite es rico en ácidos grasos y vitamina E. Tiene poderes antiinflamatorios e hidratantes, al igual que estimula el crecimiento del pelo. Aunque si tienes piel sensible, es mejor que lo evites.
Es MÁ-GI-CO. Humecta e hidrata intensamente la piel (tanto que rellena las líneas finas y arrugas), tiene propiedades anti-edad, funciona como una capa protectora entre la dermis y los agentes externos. Y aunque el nombre suena medio agresivo es un ingrediente ideal para cualquier tipo de piel.
Es un ingrediente que hidrata y restaura la piel, se encuentra de forma natural dentro del cuerpo y se puede derivar de las olivas y la caña de azúcar. A diferencia del ácido hialurónico el escualano es responsable de hidratar y sellar la humectación esencial del cuerpo. Ayudando a mejorar el desarrollo celular de forma saludable.
Imagínatelo como la solución a todos tus problemas de acné. Puedes aplicarlo sobre toda la piel como exfoliante químico (es un beta hidroxiácido ) o simplemente sobre las imperfecciones. Para evitar reacciones adversas, empieza disolviendo un poco la fórmula con tú crema hidratante. OJO: Ten cuidado con el sol, ya que este ingrediente sensibiliza la piel.
Tiene propiedades anti-inflamatorias y trabaja para abrir los poros y matar cualquier tipo de bacterias y organismos que puedan causar imperfecciones. También ayuda a exfoliar químicamente para descongestionar la piel. Funciona con todo tipo de imperfecciones, pero su especialidad son esos granitos inflamados y rojos . Al igual que puede ayudar con el acné quístico.
Este ingrediente reduce la inflamación, irritación y protege la piel gracias a que tiene fuertes antioxidantes y pelea contra las imperfecciones. En otras palabras: se deshace de los granitos a un nivel superficial y profundo al igual que ayuda a tratar la complexión. Es bueno para las imperfecciones inflamadas aunque también funciona para las no inflamatorias.
No hay nada mejor para las pieles con tendencia a imperfecciones que la niacinamida. Tiene propiedades antiinflamatorias y ayuda a tratar la hiperpigmentación y los granitos. Es el ingrediente por excelencia si quieres calmar y restaurar tu complexión, refinar los poros y aliviar los problemas de pigmentación.
Al igual que el ácido hialurónico y el escualano, las ceramidas se encuentran naturalmente dentro de la piel. Éstas refuerzan la barrera cutánea, hidratan y protegen a la piel de los agentes externos como la suciedad, las bacterias y la contaminación. Por eso, aportan firmeza, una textura suave y una luminosidad intensa.
