De una forma u otra, todo lo que comes se refleja en tu piel. Pero esta vez, no hablamos de hacer un ayuno de comida para renovar tu complexión, sino de un ayuno de productos. Así que, si sientes que tu piel está congestionada, irritada e incluso opaca, este ayuno puede ser la solución. Pero antes de que tires tus sueros a la basura, te lo explicamos cómo, cuándo y por qué hacerlo.
Por qué hacerlo
Hay quienes creen que este ayuno ayuda a que la piel se reinicie y pueda cuidarse a sí misma. Pero hay poca evidencia científica de que realmente funciona. La gran ventaja de esta práctica es que si uno de tus productos es la raíz de tus problemas, es muy fácil eliminarlo de tu rutina o cambiarlo por uno que sí te da una complexión luminosa y renovada. Al igual que te va a ayudar a ver si uno de los pasos dentro de tu rutina está saturando tu dermis.
Cómo hacerlo
Como con todos los ayunos, hay niveles y van desde un cambio sutil hasta la abstinencia completa. Te explicamos varias formas en las que puedes realizarlo:
- Realiza un micro-cambio: Este puede ser tan sencillo como saltarte el suero por las noches. El chiste es que sea un cambio pequeño enfocado en el producto o paso de tu rutina que crees que te está generando el problema.
- Alterna los días: Varía los días en los que estás dejando los productos. Por ejemplo; los días que utilizas tu suero, sáltate la esencia y viceversa.
- Elimina un paso: No a todas las pieles les funciona una rutina de 14 pasos. Elimina un paso que consideras innecesario durante unas semanas. Si notas que tu piel mejora, elimínalo permanentemente.
- Reduce al mínimo: La piel necesita un limpiador (de preferencia con pH balanceado ), un hidratante y un foto protector solar para mantener su salud y protección. Reduce tu rutina únicamente a estos tres pasos para hacer un ayuno intenso que sigue funcionando a tu favor.
- Abstinencia completa: Elimina todos los productos de tu rutina. OJO: Nosotros NO recomendamos la abstinencia completa. Ya que es un cambio demasiado agresivo y radical para la piel que puede provocar imperfecciones y daños solares.
Hay muchas formas diferentes para hacer el ayuno de la piel, lo importante es que busques la que se adapta a ti y a tus necesidades. Si al retirar los productos notas que tu piel está más luminosa e hidratada y tiene menos imperfecciones, significa que está funcionando. Si notas que está empeorando, vuelve a introducir los productos.
Cuándo hacerlo
El mejor tiempo para hacer tu ayuno es cuando sientas que tu dermis está teniendo problemas con uno de tus productos o consideras que hay unos pasos en tu rutina que la están saturando. Si tienes piel de porcelana y tienes una rutina que te funciona, evítalo por completo. Tampoco lo hagas si tienes muchos granitos, ya que tu piel necesita los ingredientes anti-acné para eliminar las imperfecciones. Y recuerda que el cambio no tiene que ser permanente, puede ser temporal, dependiendo de lo que tu piel te está pidiendo.