1. Empieza poco a poco
Nadie logra hacer un ayuno de 18 horas en su primer intento, por eso tienes que empezar de menos a más. Lo ideal es que tu primer ayuno sea de 12 horas y lo hagas un par de días a la semana. Conforme te vayas acostumbrando a este estilo de vida, puedes aumentar de 12 a 16 horas y consecutivamente a 18 horas. El número de días a la semana que lo hagas depende totalmente de ti.
2. Planea bien tu última comida
Una de las claves para evitar el hambre y los antojos por las mañanas está en lo que comes por las noches. Asegúrate de que tu última comida tenga suficiente fibra, proteína y granos integrales , estos nutrientes te ayudarán a que te sientas satisfecha mientras nutren tu cuerpo.