El brote de coronavirus primero golpeó China, uno de los mercados más importantes en la moda de lujo , para después convertirse en una pandemia y afectar al mundo. Al llevar una vetaja de un par de meses con el resto del planeta, Asia ya va saliendo de la contingencia y la firma francesa Hermès está reabriendo sus tiendas en China continental y Corea del Sur. Como una firma de lujo particularmente resistente a las recesiones y devaluación , Hermès es un ejemplo a seguir para la industria de moda de lujo; debido a su producción artesanal y política de existencias, ha superado las expectativas de 12% de caída en sus ventas para el trimestre, reportando solo 7.7% comparado con competidores que reportan 15% o más.
Las operaciones de en sitios de producción y logística se reanudó el 14 de abril , de acuerdo a normas de seguridad y medidas de protección para cuidad la salud del personal, asegura Hermès. Sin emabargo, el presidente ejecutivo de la firma Axel Dumas , dijo que el 75% de las tiendas continúan cerradas, por lo que en los próximos meses esperan una fuerte baja.
"Para 2020, los impactos de la epidemia de COVID-19 son actualmente difíciles de evaluar, ya que la escala, la duración y el alcance geográfico de la crisis evolucionan todos los días", señaló la empresa que se está apegando a una meta de crecimiento a mediano plazo y sus ejecutivos renunciaron a su aumento fijo, por lo que sus salarios serán igual que en 2019. Además, Hermès ha donado más de 20 millones de euros a varios hospitales de París, así como 30 toneladas de gel antibacterial que produce en una fábrica de perfumes, y también ha donado 31 mil cubrebocas . De este modo, la compañía demuestra su solidez, valores y compromiso social, un factor que será de gran importancia en la industria poscoronavirus .