Mis días cambiaron por completo cuando empecé a levantarme a las 7:30 am en lugar de las 8:30. Parece un cambio insignificante, pero me dio el espacio y la calma para empezar mis días mejor. No te voy a decir que tienes que levantarte a las 4:45 am para vivir tu mejor vida, pero sí creo que despertar temprano te dará más de lo que imaginas, por lo que te dejo esta guía rápida para que puedas hacerlo tan temprano como quieras, sin morir de sueño en el intento.
Cómo despertarte más temprano en siete sencillos pasos
Te prometemos que no vas a morir de sueño en el intento
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1. Encuentra un por qué
Voy a sonar cursi, pero siempre que te propongas hacer un cambio de hábito es importante establecer el “por qué” o la razón por la que lo estás haciendo. Apúntalo en un post-it o en las notas de tu celular para recordarte constantemente que el esfuerzo que estás haciendo vale la pena, y lo qué estás ganando a cambio, especialmente si es a largo plazo.
2. Haz tus cuentas
El cuerpo necesita entre siete y diez horas de sueño para descansar y restaurarse (esto no lo digo yo, lo dice la Clínica Mayo), por lo que es esencial que adaptes tus horarios y sigas durmiendo lo que *realmente* necesitas. Si tienes que dormirte más temprano, hazlo. Si estás sacrificando horas valiosas de sueño, lo estás haciendo mal.
3. La constancia es clave
Cuando se trata de dormir, mantener la constancia es clave para sentirse bien. Cuando te duermes a distintas horas cada noche y luego te vas de fiesta hasta la madrugada, estás sometiendo a tu cuerpo al mismo efecto que tiene el jet-lag. Y de acuerdo con la doctora y especialista en sueño, Jennifer Martin, esto afecta la producción de melatonina (la hormona del sueño), provoca inflamación, retrasa la recuperación e incluso disminuye los niveles de energía. Además, ser constante es indispensable para crear y mantener un hábito; no me creas a mí, créele a James Clear, autor de Atomic Habits.
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4. Tómatelo con calma
Si normalmente te despiertas a las diez, olvídate de poner tu alarma a las cinco de la mañana; lo único que vas a provocar es tu propia locura. Necesitas empezar poco a poco, retrasando tu alarma quince o treinta minutos cada semana hasta que llegues a tu hora meta. De esta forma, tu reloj interno (a.k.a tu ritmo circadiano) se puede adaptar sin problemas. Así, tu cuerpo y mente responderán mejor al cambio.
5. Snooze 0, Tú 1
Cuando suene tu alarma, tienes que hacer todo lo posible para no darle snooze. Aunque se siente delicioso, la doctora Cheri Mah, especialista en sueño, explicó en el podcast Trained que esos minutos extra no te ayudan a descansar más ni a que te sientas mejor, todo lo contrario. Si sientes que necesitas dormir más, lo ideal es calcular tus horas de sueño con los minutos de snooze incluidos y levantarte inmediatamente cuando suene tu despertador.
6. Energízate
Ya ganaste contra el snooze, ahora toca ganarle a tu instinto de pasar 45 minutos en TikTok . Mejor, levántate de tu cama y haz algo que te de energía instantánea. Esto puede ser tomarte un té o un café mientras lees, hacer ejercicio, preparar tu desayuno favorito, meditar, escribir en tu diario e incluso darte un baño con agua fría. Aquí lo más importante es que hagas algo que también te anime a levantarte y empezar el día.
7. No te olvides de todo lo demás
Lo anterior es básico e indispensable para despertar más temprano, pero no te olvides que la forma en la que te vas a dormir es esencial. Haz ejercicio (treinta minutos está bien) y evita las siestas. Corta tu consumo de café o cafeína al menos seis horas antes de dormir. Disminuye el alcohol y tabaco al máximo, evita las pantallas una hora antes de acostarte. Por último, convierte tu cuarto en un espacio de relajación y paz mental para que tu subconsciente lo relacione con el descanso.
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