Esta cuarentena está arruinando el sueño y empeorando considerablemente el insomnio. Al ponerme a investigar formas para combatirlo, me encontré mil y un soluciones, pero muchas de ellas súper complicadas. Entonces aquí te dejamos 5 trucos sencillos para cambiar un poco tus hábitos y mejorar mucho la forma en la que duermes.
ELLE TIP: Hacer ejercicio diario y controlar lo que comes también ayuda. Si tienes las ganas y la energía, hazlo también. <3
1. Escribe antes de irte a dormir
El journaling es una técnica ultra fácil de hacer y tiene muchísimos beneficios. Entre ellos, te ayuda a controlar el estrés y la ansiedad, a dar prioridad a tus problemas, miedos y preocupaciones. Antes de irte a dormir, siéntate (no en tu cama) y escríbelo todo. No tiene que ser súper poético ni necesita una redacción impecable, simplemente anota todo lo que está en tu cabeza. También puedes hacer una lista de todo lo que tienes que hacer al día siguiente para que te vayas a dormir sin pendientes.
2. Establece un horario fijo
Despiértate y duérmete a la misma hora todos los días. Sí, incluyendo los fines de semana. Si tus horarios de sueño están fragmentados, se vuelven totalmente impredecibles, y por ende, el insomnio o el mal dormir se intensifica. ELLE TIP: Una hora antes de dormir, apaga cualquier tipo de pantalla (son súper estimulantes, te explicamos por qué ) y pon tu celular en silencio.
3. Medita, medita, medita
Existen muchísimos programas de meditación que ayudan a calmar la mente, liberarla del estrés, la ansiedad y todo lo demás. Si meditar se te complica mucho (te entendemos, no estás sola) prueba hacer respiraciones. Una de las más fáciles y efectivas es la de 4-7-8, inhala durante 4 segundos, mantén el aire durante 7 segundos y exhala durante 8. Repite varias veces mientras te centras en cada respiración.
4. Disminuye la cafeína
Trata de limitar las horas en las que tomas café , té o bebidas energizantes. Encuentra qué horarios son los que te funcionan (por ejemplo, a mi me funciona dejar de tomar té verde a las 11am) y establécelos firmemente para dejar de interferir con tu ciclo de sueño. Pero no cortes por completo la cafeína, ya que los síntomas de abstinencia pueden empeorar mucho el insomnio.
5. No lo fuerces
Si no se puede, no se puede. No te tortures ni te estreses más, levántate y haz alguna actividad que te relaje. Trata de irte a otro cuarto, siéntate cómoda y lee un poco hasta que te entre el sueño, regrésate a tu cuarto y vuélvelo a intentar.