El relanzamiento de Topshop provoca nostalgia y esto es todo lo que sabemos

La tienda insignia de la marca en Oxford Street, que cerró en 2021 y fue comprada posteriormente por Ikea , es material de leyenda cultural. Inaugurada en 1994, tenía tres pisos, 90,000 pies cuadrados y era el único lugar donde podías comprar un par de tacones con remaches de la colaboración de Christopher Kane, colar a tu novio en los vestidores para que también se probara unos jeans Joni, y luego hacerte una manicura de mezcla y combinación en Wah Nails, todo acompañado por la música de un DJ ubicado cerca de la puerta de entrada (diría que tal vez eso solo lo hacia yo, pero resulta que esta era una experiencia bastante universal).

El imponente edificio de siete pisos era mucho más que una simple tienda: ubicado justo enfrente del metro, servía como un lugar de encuentro, un sitio para pasar el rato y una puerta de entrada a la moda para adolescentes suburbanos como yo. Fui a una boda el año pasado donde, durante el discurso del padrino, pidió a los invitados levantar una copa por el cariñosamente llamado 'Big Topshop', ya que jugó un papel tan importante en la relación de la pareja.

Es difícil de imaginar, pero Topshop existió en una época previa a los iPhones, las redes sociales y las compras en línea. Así que, si volviera a abrir en 2025, simplemente no podría ser igual.

¿Qué hizo a Topshop tan exitosa?

El magnate del retail Philip Green compró el grupo Arcadia, que poseía Topshop, Miss Selfridges, Wallis, entre otras marcas, en 2002. A pesar de que Topshop comenzó en el sótano de una tienda por departamentos en Sheffield en 1964, fue en ese momento cuando realmente comenzó a despegar.

En 2003, la marca se convirtió en patrocinador principal del British Fashion Council, apoyando el programa NewGen y el incubador de talentos Fashion East. Ese mismo año, también estableció un espacio para desfiles con el fin de apoyar a jóvenes talentos. Topshop comenzó a desarrollar colaboraciones exclusivas con diseñadores emergentes como Mary Katrantzou, Jonathan Saunders, Christopher Kane, Meadham Kirchhoff y JW Anderson. Esta oferta única hizo que Topshop estuviera por encima del resto de la moda en las calles, con colecciones que solo se vendían en la tienda insignia y que a menudo se agotaban. Su etiqueta propia, Topshop Unique, comenzó a presentarse en el calendario de la Semana de la Moda de Londres en 2005, consolidando las credenciales de moda de la marca.

Green siguió adelante con su visión, aprovechando el poder de las celebridades. El ahora desacreditado empresario reclutó a su amiga Kate Moss para co-crear una colección para Topshop en 2007. ¿El resultado? Una completa locura de moda. La imagen de Moss en la vitrina de la tienda, descansando entre los maniquíes, con su maquillaje ahumado y un vestido rojo brillante (ajustado a la cintura con un cinturón de broche, por supuesto) merece la palabra "icónica". Miles de fanáticos hicieron fila frente a la tienda, desesperados por conseguir prendas que se inspiraban en piezas del propio armario de Moss.

Esto llevó a Topshop a un nivel global, abriendo una tienda en 2009 cerca de Broadway en Nueva York. Inaugurada oficialmente por Moss y Green, y celebrada con varias fiestas y eventos lujosos, a los que asistieron las "it-girls" de la época como Blake Lively, Jennifer Lopez y Olivia Palermo, con presentaciones de Mark Ronson, Santigold y Adele (¿realmente podría haber sido más de 2009?), la humilde marca de la calle se consolidó en el escenario mundial.

¿Qué salió mal?

En 2010, Green fue acusado de evasión fiscal. Los manifestantes acudieron a las tiendas de Topshop en el Reino Unido después de que el entonces Primer Ministro David Cameron eligiera a Green para liderar una revisión gubernamental sobre el gasto. Esto ocurrió después de que Arcadia pagara un dividendo de £1.2 mil millones a la esposa de Green, Tina, en 2005, el pago más grande en la historia corporativa del Reino Unido. Como residente de Mónaco, ella no pagó impuestos británicos sobre esa cantidad.

El estilo de vida lujoso de la familia Green comenzó a molestar a la gente. En 2016, BHS (comprado por Green en 2000) colapsó, entrando en administración con la pérdida de 11,000 empleos y un déficit de pensiones de £571 millones. La familia Green y otros accionistas recolectaron al menos £580 millones de la cadena durante su propiedad. Más tarde, ese mismo año, los parlamentarios votaron para despojar a Green de su título de caballero, llamándolo la "cara inaceptable del capitalismo" en un informe.

Ese mismo año, Topshop lanzó una colaboración con Beyoncé, una línea de ropa deportiva llamada Ivy Park . La asociación fue breve, ya que en 2018, Green fue nombrado en el parlamento como el hombre acusado por The Telegraph de acoso sexual y abuso racial hacia el personal. Beyoncé cortó todos los lazos con Topshop y le compró su participación en la compañía.

La última estocada fue la pandemia. A finales de 2020, Arcadia declaró que el coronavirus había tenido "un impacto material en el comercio de nuestros negocios". Con un modelo de negocio que dependía en gran medida del retail físico, quedó atrás frente a otros competidores más digitalizados, y en noviembre cayó en administración. ASOS adquirió Topshop el febrero siguiente y todas las tiendas fueron cerradas.

¿Qué sabemos sobre el regreso de Topshop?

Por ahora, no mucho. El sitio web de Topshop todavía redirige a los usuarios a ASOS para comprar, y la búsqueda del tesoro con cupones que tuvo lugar el fin de semana fue creada en colaboración con el artista Russ Jones. Los participantes debían localizar un espejo ganador de entre 21 distribuidos por Oxford Street y Soho, todos diseñados por Jones, para ganar cupones por valor de £1,000.

Moses Rashid, director global de marketing de Topshop, dijo en un comunicado: "Estamos emocionados de ver el amor por Topshop y Topman en las redes sociales. Apoyar a los talentos locales, compartir el escenario con creativos y llevar la energía única de Londres a nuestros fanáticos siempre ha sido parte del legado de Topshop".

Rashid se unió a la marca (que sigue siendo parte de ASOS) en febrero de este año y es el fundador de la plataforma de reventa de zapatillas The Edit Ldn. En el mismo mes, Michelle Wilson, exdirectora senior de estrategia y desarrollo corporativo en ASOS, fue nombrada directora general de Topshop y Topman. ¿Podría haber un anuncio de un director creativo destacado en camino, considerando que en 2011, el minorista fichó a la directora de moda de British Vogue, Kate Phelan (quien ahora es directora creativa de Harvey Nichols)?

Parece bastante probable, pero ¿puede un nuevo equipo recuperar el espíritu de la época dorada de la marca? Ya sea que las tiendas físicas estén o no en los planes, el panorama del retail está desordenado. Hay muchos más competidores de moda rápida, desafíos financieros y demandas de sostenibilidad que en los años 2000, y Topshop tendrá que hacer más que asociarse con celebridades o diseñadores emergentes para destacar entre la multitud. Y dado todo lo que salió a la luz sobre el reinado de Philip Green, un gigantesco imperio retail no se siente tan atractivo como antes. No olvidemos que Topshop también se quedó atrás en cuanto a inclusión de tallas, ya que solo llegaba hasta la talla 16 del Reino Unido y rara vez llevaba tallas más grandes en las tiendas.

Quizá lo que todos anhelamos desesperadamente es un tiempo más simple: un tiempo en el que podías conseguir un bonito vestido por £40 sin saber si deberías cuestionar si estaba destruyendo el planeta o sentir que tenías que publicarlo exhaustivamente en línea. Demasiado ha cambiado (para bien y para mal), y la generación más joven de hoy nunca lo entenderá.

Este artículo fue publicado por primera vez en ELLE UK .