Ya conoces la premisa. Ocho ricos jet setters llegan a un resort de lujo ultra exclusivo con sus armarios llenos de secretos hasta que uno de ellos llega a su fin. Nosotros, a su vez, pasamos largas horas armando el mosaico del genio de Mike White, considerando y debatiendo sobre posibles sospechosos y víctimas, mientras la angustia y el caos de los huéspedes sacuden la trama. Solo The White Lotus podría ser así, que regresa en su tercera temporada, pero sin uno de sus pilares: Jennifer Coolidge como la excéntrica, cuasi-espiritual, deslumbrantemente privilegiada, torpemente entrañable y dolorosamente cómica heredera, Tanya McQuoid .
The White Lotus 3 está sobreviviendo sin Tanya McQuoid, ¿pero está prosperando?
Para resucitar la fortuna de The White Lotus en su recién confirmada cuarta temporada, necesita otro personaje recurrente más grande que la vida. Necesita un Tanya McQuoid 2.0.
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Se ha hablado mucho sobre la actual temporada de The White Lotus. Se ha llamado más atrevida que las temporadas anteriores, de desarrollo lento y desigual, e incluso decepcionante. El creador de la serie y maestro de marionetas, Mike White – quien concibió la idea de la tercera temporada de The White Lotus mientras tenía un sueño febril debido a una bronquitis durante una búsqueda de locaciones en Tailandia – ha logrado mantener la histeria característica del show, las hipocresías y la hilaridad, pero esta temporada carece de los momentos de pura genialidad cómica por los que Coolidge alcanzó una viralidad masiva.
Sin los breves y agudos estallidos de la comedia ácida de Tanya — "¡Estos gays, están tratando de asesinarme!" — parece que la serie no logra basarse en un solo personaje de la misma manera. Es cierto que The White Lotus es un elenco coral, pero la trama de la tercera temporada, a pesar de su caos en ebullición, se siente imperturbable, con una energía más torpe que vertiginosa. Y es por eso que la ausencia de Coolidge se siente tan intensamente.
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Vamos avanzando por la temporada, pero sin las inyecciones de alivio cómico que Coolidge proporcionaba tan generosamente. Parker Posey como Victoria Ratliff es sin duda una fuerte sucesora, pero su papel se siente menos crucial para la serie. El regreso de Greg-Gary, el exmarido de Tanya y posible asesino, ha mantenido algo de la intriga que Tanya dejó en su estela, pero sin la propia Tanya, la serie se siente nada más que un misterio de asesinato mejorado (por supuesto, se podría argumentar que siempre ha sido solo eso). Sin embargo, internet también está lamentando la pérdida de la matriarca de la serie. Solo en los últimos siete días, las búsquedas de 'Tanya McQuoid' aumentaron un 100%, según Google Trends.
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The White Lotus construyó sus cimientos sobre la base de sus personajes perdidos. Esta temporada, parece que no solo los personajes están perdidos, sino también la razón de ser de White. Las dos primeras temporadas de The White Lotus cortaron de manera acerba a través de la cacofonía del ruido en internet, afirmando a la serie como una sátira social única que mantenía la atención de su audiencia firmemente en su poder. No te equivoques: el show sigue siendo una locura y brillante, pero le falta ese "je ne sais quoi" que Tanya cimentó en su reputación. Para resucitar la fortuna de The White Lotus en su cuarta temporada recién confirmada, necesita otro personaje recurrente más grande que la vida. Necesita un Tanya McQuoid 2.0.
Este artículo fue publicado por primera vez en ELLE UK .
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