Momento de sinceridad: he roto tres gua shas tratando de lavarlas. ¿Coraje? Muchísimo. Pero, necesito lavarlas seguido porque mi piel se puede llenar de granitos con cualquier descuido. Después de mucha investigación (y prueba y error), descifré la fórmula perfecta para lavar gua shas, rodillos faciales y cualquier otra herramienta (no electrónica) que pueda ser sumergida en agua.
Cómo lavar tu gua sha y tu rodillo facial sin romperlos ni dañarlos
Sí, esta es una señal para que lo hagas más seguido
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ELLE PARÉNTESIS: Por qué debes lavar tus herramientas
Yo sé que es de flojera y que ya tienes suficiente tarea con tus brochas, pero lavar tus herramientas es importante por varias razones. La primera es que si están sucias y tienen bacterias, pueden provocar brotes de acné. Por otra parte, si siguen teniendo residuos de otros productos que usaste hace varios días, pueden irritar la piel. Por último, una herramienta limpia se desliza con mayor facilidad sobre la piel y aumenta la absorción de producto.
1. Sumerge en agua
Esta es la forma más segura de empezar el proceso y solo necesitas llenar un bowl pequeño con agua tibia y un poquito de jabón. El jabón puede ser antibacterial (de preferencia sin fragancias ni colorantes) o tu limpiador facial. Sumerge tus herramientas durante varios minutos y sigue con el siguiente paso
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2. Cepilla, en caso de ser necesario
Para una limpieza más profunda, usa un cepillo de dientes (limpio y nuevo) para cepillar con un poco de jabón y agua tibia tus herramientas (especialmente si tienen cerdas donde puede acumularse el producto). Aquí es donde más cuidado tienes que tener porque el agua y el jabón hacen que todo sea súper resbaloso. A mi me funciona poner una toalla por debajo de la zona donde voy a cepillar mi gua sha para amortiguar cualquier caída.
3. Desinfecta y guarda
Por último, si tienes una piel con tendencias acneicas, te recomiendo desinfectar tus herramientas con un poco de alcohol. Una vez se haya evaporado, guárdalas en un lugar donde se mantendrán limpias. En lo personal, me gusta guardarlas dentro de una bolsa Ziploc para evitar cualquier contaminación.
4. Enjuaga diario y repite la limpieza profunda, cuando sea necesario
Para mantener tu piel sana y tus herramientas limpias es ESENCIAL que las enjuagues siempre que las uses con agua tibia. La limpieza profunda puedes realizarla cuando sientas que sea necesario, en lo personal me gusta hacerlo cada semana o cada quince días (dependiendo de qué tanto las usé).
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