Probamos un facial que te deja la piel como si te hubieras hecho un lifting

La sesión comienza con una limpieza express para preparar la piel y permitir que cada técnica penetre mejor. Luego llega la magia: el Gua Sha y el masaje manual trabajan la musculatura, liberando la tensión acumulada (sobre todo en mandíbula y frente), mientras que el drenaje linfático reduce la hinchazón y redefine el óvalo facial. La microcorriente estimula los músculos para un efecto de lifting inmediato, seguido de un masaje para desinflamar el contorno de los ojos y minimizar las ojeras. El toque final llega con los Cryoballs, que sellan el tratamiento con un golpe de frescura, cerrando poros y dejando la piel con un glow radiante. Para proteger y prolongar los resultados, aplican un bloqueador facial y cierran la sesión con un té de cortesía que extiende la relajación después de salir de la cabina.

Al terminar, el espejo confirmó lo que sentía: mi rostro se veía más definido, los pómulos elevados y una piel más luminosa y descansada. Lo más sorprendente fue la sensación de ligereza en el rostro, como si hubieran eliminado toda señal de estrés acumulado. Recomiendan realizarse el tratamiento cada quince días para mantener y potenciar los resultados, algo que después de esta experiencia, considero una inversión más que un lujo. El Total Fix es un recordatorio de que el autocuidado no se trata solo de verte bien, sino de sentirte renovada por dentro. No es apto para pieles con acné activo ni para embarazadas, pero para el resto, es una invitación a experimentar un lifting natural que combina lo mejor del wellness con la efectividad de la estética avanzada. Youth for Us tiene sucursales en la Condesa, Roma y Polanco en la CDMX.