El pasado 20 de noviembre, Jennifer Lawrence tuvo un fallo de vestuario al dar el botonazo mientras presentaba el espectáculo de luces navideñas de Dior en Saks Fifth Avenue en la ciudad de Nueva York y, como siempre, ¡tuvo la mejor reacción!
Si algo admiramos de Jennifer Lawrence es su personalidad graciosa y su increíble sentido del humor; pues suele tomar los momentos más incómodos, como cuando se cayó al recibir su Premio Oscar o cuando no supo que decir en la conferencia de los Globos de Oro, para reírse a carcajadas y hasta burlarse de ella misma; y su última aparición no fue la excepción.