Los murales de Diego Rivera y los arcos del patio central del Antiguo Colegio de San Ildefonso sirvieron para enmarcar la presentación Crucero 2024 de Dior en México. A pesar de que la lluvia no ceso, esto no fue un impedimento para que la colección se presentara con éxito ante todos los presentes.
Dior en México: así fue el desfile más esperado por los mexicanos
La gran protagonista de esta colección fue la mariposa, que estuvo presente en accesorios como collares, estampados, cinturones y hasta en las invitaciones. Incluso, todas las modelos estaban peinadas con dos trenzas unidas por detrás y, en la parte baja de la nuca, todas portaban una mariposa.
En cuanto al maquillaje, las modelos utilizaron uno muy natural. El makeup artist reveló en exclusiva para ELLE México que el enfoque estaba en que tuvieran unas cejas poderosas, muy pobladas para que sirvieran como énfasis a la mirada; inspiradas en las de Frida Kahlo.
Entre la inspiración mexicana que pudimos ver en las piezas presentadas por Dior está el traje charro, que estuvo presente en la bar jacket de la maison parisina y en muchas chaquetas cortas con un bordado alusivo a la charrería. Y, por supuesto, lo que todos estábamos esperando: la inspiración de Frida Khalo.
La colección contó con muchos trajes sastre y también smokings inspirados en las fotografías que William Kahlo le hizo a Frida, en donde ella vestía trajes masculinos. Sin embargo, lo más impactante de esta colección es que muchas de las piezas están intervenidas por artesanos mexicanos, de quienes vemos su trabajo en los espectaculares bordados y minuciosos detalles.
Para ello, Maria Grazia colaboró con algunas marcas y ateliers artesanales al rededor de la República tales como: el taller textil Yolcentle de Tlacomulco, Sna Jolobil de Chiapas, el tejedor oaxaqueño, Remigio Mestas, y la marca Rocinante de Oaxaca. En cuanto a los accesorios, la firma francesa presentó una serie de piezas de joyería creadas con las técnicas de orfebrería de los talleres Plata Villa en la Ciudad de México, mientras que los sombreros estilo Jarocho estuvieron a cargo de Alema Atelier, originario de San Francisco del Rincón.
El cierre, el momento climax de la presentación, fue tan poderoso como emotivo. Varias modelos desfilaron en una colección cápsula protagonizada por vestidos blancos bordados con palabras rojas, algunos mensajes de amor y feminismo, pero otros con insultos que mujeres reciben en su día a día como: “vaca”, “gata”, “femi-nazi”, “histérica”, etc.
Para complementar este segmento, Maria Grazia usó de fondo la canción “Canción sin miedo” de Vivir Quintana, mejor conocido como un himno contra el feminicidio, convirtiéndose en un momento de momento y de sororidad. La lluvia no ceso durante todo el desfile, pero agregó dramatismo a este poderoso show en México que puso en el centro de atención la violencia que se vive en nuestro país.