5 motivos para no perderte la exposición de Cartier en el Museo Jumex

Si aún te quedan dudas sobre si visitar o no esta exposición, permíteme enlistar los motivos por los que es -verdaderamente- un imperdible.

1. Es un momento histórico en las exhibiciones de moda en México

La colección Cartier ha tenido numerosas exhibiciones alrededor del mundo, pero ninguna de ellas es igual gracias al trabajo de curaduría que se hace a nivel regional de cada lugar que visita. En esta ocasión, a cargo de Ana Elena Mallet , quien imaginó 5 núcleos temáticos para organizar la exposición. Mallet ha dedicado su carrera a dar visibilidad a la moda y los textiles como piezas dignas de ser exhibidas en un museo y subraya la importancia de que un museo de arte contemporáneo del nivel del Museo Jumex abra sus puertas a la joyería y reivindique el papel de las artes aplicadas y la interdisciplina en el arte.

Esta exposición reúne un conjunto imposible de piezas que probablemente en muchos años, o incluso nunca, volvamos a ver juntas. Pero eso te lo cuento en el punto #3.

2. El diseño museográfico a cargo de la arquitecta Frida Escobedo

Existieron dos inspiraciones para Escobedo y su equipo al diseñar este espacio: el interior de las minas, para regresar al espectador al origen más crudo de las piedras y metales preciosos, y las fotografías de las pirámides de Tenayuca por Josef Albers. Con esto en mente, se crearon más de mil paneles de concreto que recubren las paredes de las salas de la exposición, dándoles textura, y nos sumergen en una oscuridad casi total donde la tenue luz de las vitrinas obliga al ojo a enfocarse en las joyas. Las estanterías sobre las que reposan algunas de las piezas, siguen la geometría prehispánica del tablero talud.

#ELLEdato: La pieza encargada de abrir la exposición es un broche en forma de pirámide de 1935 que nos invita a reflexionar en la histórica relación de la Maison con nuestro país y a adentrarnos en la museografía propuesta por Frida Escobedo.

3. Más de 160 piezas históricas reunidas en un solo lugar

Hablemos sobre las particularidades de las joyas exhibidas en “El diseño de Cartier: Un legado vivo”. Una gran parte de estas piezas pertenece a la colección Cartier. Es decir, al archivo que la misma marca ha creado para conservar su propio patrimonio. Los encargados del archivo Cartier se dedican a localizar piezas históricas y a comprarlas de regreso, algunas veces de forma directa y otras, a través de subastas. Estas piezas únicamente dejan el archivo para ocasiones muy especiales, como esta exposición.

Las joyas que no pertenecen a Cartier, vienen de coleccionistas privados que prestan sus piezas únicamente para esta muestra. Es por eso que enfatizo que el ver a este conjunto particular, que suma más de 160 piezas, reunidos en un mismo lugar, no será fácil de repetir, por lo que cada una de las joyas que ves a tu alrededor ¡es especial!

4. Los cocodrilos y la serpiente de María Félix

Con el punto anterior, intento exaltar la importancia de todo lo que verás en esta expo. Pero en este punto quiero ir de lo general a lo particular y el motivo por el que quizá muchos llegaron a la exposición. Dos de las piezas más emblemáticas de María Félix: la serpiente de diamantes y los cocodrilos engarzados. Dos joyas de tal magnitud que su valor hoy es incalculable. Encargadas por y elaboradas a la medida para una mexicana que hizo historia en la casa joyera por sus opulentos encargos.

No hay foto, video o animación en realidad aumentada que le haga justicia a estas auténticas obras de arte como verlas en vivo. La última vez que estuvieron en México fue en 1999, y hoy, casi 25 años después, están de regreso. Sobra decirte que no debes dejar pasar 25 años para que esto suceda de nuevo y ¡ve a verlas ya! Descubre la historia de cada una de ellas y déjate fascinar por su hipnotizante belleza.

5. Los tesoros que no conocías de María Félix

La Doña traza un vínculo directo entre Cartier y México y su colección de reptiles son el máximo exponente de la mancuerna que lograron entre ambos. Pero esta colección no se limita al collar de serpiente y los cocodrilos, en la exhibición encontrarás otros encargos hechos a la medida que quizá no conocías, como los aretes de serpiente o el cinturón hecho con Centenarios de oro. María Félix también fue dueña de un par de panteras Cartier y espectaculares pendientes de inspiración botánica.

Aunque he dedicado dos puntos a la relevancia de María Félix, debes saber que este núcleo es solo el gran cierre de una exposición que vale la pena disfrutar completa.