Para mantener la piel equilibrada, es esencial aplicar los productos en un orden específico al momento de realizar tu rutina de skincare . En cuanto al tónico, es ideal aplicarlo después de la limpieza y antes de la hidratación; así no solo aumenta la absorción de otros productos, también minimiza los poros dilatados.
Los tónicos exfoliantes, en particular, se enfocan en eliminar restos de impurezas, equilibrar el pH y refrescar la piel. Además de deshacerse de células muertas, mejorar la textura y potencian la luminosidad. Por lo que, cuando hablamos de una piel suave, se ha convertido en un producto estrella.