1. Ve por un corte (regularmente)
Un corte de pelo es la forma más rápida y sencilla de deshacerte de las puntas abiertas y secas. No necesita ser un corte radical de 15cm, un despunte también funciona. Lo ideal es que vayas por un corte regularmente, cada seis u ocho semanas. Si no quieres ir tan seguido al salón, aprende a hacer despuntes en casa (solo asegúrate de que estás usando unas buenas tijeras para hacerlo, no las que te compraron en primaria).
2. Apuesta por un shampoo hidratante
Un shampoo formulado con ingredientes como aceite de argán , aceite de coco, ácido hialurónico y vitamina E hará maravillas para restaurar tu pelo seco. Otro gran consejo es que esté formulado sin sulfatos, ya que estos, aunque son buenísimos para eliminar el exceso de grasa y suciedad, pueden llegar a secar demasiado la fibra capilar.

3. Evita el lavado diario
A menos de que tengas pelo graso, trata de lavarlo un día sí, un día no. Los aceites naturales funcionan como una capa protectora y nutritiva. Los días que no te toque lavado, puedes enjuagarte bien el pelo con agua para deshacerte del sudor y de la suciedad superficial. Solo recuerda siempre terminar con un poco de acondicionador para hidratar, nutrir y sellar las puntas.
