El tuco más sencillo del mundo
Olvídate de todo lo que haz visto online, la clave del éxito es muy, muy, muy sencilla y solo requiere un producto: vaselina. Lo primero que vas a hacer es aplicar una capa ligera de vaselina sobre tus labios y seguir con otra capa ligera de lipgloss. No te podemos explicar la ciencia exacta, pero la vaselina ayuda a suavizar la textura del gloss e intensificar su acabado instantáneamente.
PRO TIP: Si quieres darle un boost de hidratación a tus labios, aplica un poco de crema hidratante para el contorno de ojos y sigue con la vaselina para sellar sus efectos.