1. Prepara la complexión
Esto depende totalmente de que tan arreglado quieres que sea tu maquillaje. Si quieres una cobertura completa, apuesta por base y corrector. Si prefieres una cobertura media, aplica un poco de base en el centro de la cara y difumina hacia afuera. Si quieres una cobertura baja, puedes corregir zonas específicas con un corrector o simplemente apostar por un look nude. Hagas lo que hagas, te recomendamos usar productos con acabado luminoso para darle un toque natural y sano a la piel.
