Ahora no hay dieta más popular que la keto. El hype ha sido tanto que hay toda una industria de comida "keto". Esto y el ayuno intermitente han sido de lo más comentado durante la cuarentena. Con tal de no subir de peso por la falta de movimiento, y llevar una vida más sana, muchos han recurrido a estas dietas.
Desde que inició el 2020, los especialistas, por ejemplo en Forbes, pronosticaron que estos dos métodos serían las tendencias alimenticias del año. Pero esto no significa que sean las mejores dietas, ni las más indicadas para bajar de peso. Hay un estudio que cada año revela cuál es la mejor dieta en todo sentido, es el US News y World Report’s 2020.
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Este considera lo siguiente en una dieta "óptima": equilibrio, mantenimiento, compatibilidad con la familia, sostenibilidad, junto con salud. Califican estas dietas y métodos de acuerdo con lo factible que es que sigas la dieta y que mantengas ese estilo de vida y por ende, el peso y la salud.
A continuación enumeramos las mejores dietas del año, de la más beneficiosa, a la menos. Y para sorpresa o shock de algunos, la keto tiene una posición muy baja. Las dietas que funcionan bien son seguras, sensatas y respaldadas por la ciencia, así que échale un ojo a esta lista.
1. Dieta mediterránea
Astrid Stawiarz/Getty Images for Bambini Furtuna.(Astrid Stawiarz/Getty Images for Bambini Furtuna)
Por tercer año consecutivo, la bien investigada dieta mediterránea ganó el oro en US News y World Report’s 2020, la clasificación de las mejores dietas. Por si no la conoces, la mediterránea la cocina basada en plantas, y de acuerdo con este la dieta más fácil de seguir, la mejor dieta basada en plantas y la mejor dieta para la diabetes.
La dieta se centra en comer menos carne roja, azúcar y grasas saturadas y más pescado y aceite de oliva ricos en omega 3. El vino tinto se puede disfrutar con moderación. Las comidas del Mediterráneo se han relacionado con huesos más fuertes, un corazón más sano, un menor riesgo de demencia y cáncer de mama, y una vida más larga, junto con un menor riesgo de diabetes y presión arterial alta.
Junto con la dieta flexitariana, la dieta Dash es una de las mejores, según el estudio. Significa Dietary Approaches to Stop Hypertension y es un enfoque de por vida para una alimentación saludable que está diseñado para ayudar o prevenir la hipertensión. Es baja en sodio y destaca verduras, frutas y alimentos lácteos bajos en grasa y permite en cantidades moderadas, granos enteros, pescado, aves y nueces.
Lo importante de una dieta es que permanezca, no se trata de tendencia. Afortunadamente hay dietas que han demostrado su permanencia. Está comprobado que ser flexitariano es una gran dieta. Es básicamente una dieta vegetariana que permite comer ocasionalmente carne o pescado, por lo que es "flexible". Se enfoca en granos enteros, frutas, verduras y proteínas vegetales.
4. Weight Watchers
Foto Dan Kitwood/Getty Images)(Dan Kitwood/Getty Images)
Es uno de los programas más famosos de pérdida de peso en Estados Unidos. Lo han transformado a través de los años, y ahora tiene un multi modelo donde te ofrecen tres formas de seguir el programa para que tengas más opciones. Aunque todavía se utiliza para perder kilos libras, también se centra en inspirar una vida saludable.
5. Dieta Volumétrica
La dieta volumétrica separa los alimentos en cuatro grupos.(Dylan Rivesr)
Este es un método que han seguido varias celebs como Angelina Jolie. Se trata de aumentar el volumen de la comida sin elevar el consumo de calorías. “Una revolucionaria pero sencilla forma de alimentación: alimentos vegetales variados y abundantes y mucha agua, complementados con grasa saludables, buenos carbohidratos y suficiente proteínas”. La comida se divide en cuatro grupos.
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35. Keto
Kris Connor/Getty Images.(Kris Connor)
La dieta keto está en la posición 35 del ranking. Incluso está después de la controversial dieta Dukan. Ambas dietas se basan en la cetosis, un estado metabólico que quema las reservas de grasa del cuerpo en lugar de carbohidratos, la fuente natural de energía del cuerpo. Lo cual, los especialistas piensan que es completamente insostenible, además que podría crear enfermedades crónicas por el alto consumo de proteína de origen animal. Además, faltan estudios que comprueben su eficacia a largo plazo.
