Una Navidad sin reglas: el universo de María Bottle llega a BIMBA Y LOLA
BIMBA Y LOLA inaugura la temporada con una Navidad distinta, más libre, más juguetona, más irreverente y con un toque surrealista que encuentra en María Bottle a su cómplice perfecta. La mexicana protagoniza la campaña festiva de la firma española en un encuentro que se siente tan natural como inevitable.
María, creadora de contenido y artista visual, posee esa frescura que convierte la moda en una conversación espontánea, sin fórmulas ni poses. Sobre llevar su estética al universo navideño de BIMBA Y LOLA, lo resume con claridad: “Creo que Bimba y yo tenemos un alma muy parecida, una intención de comunicar y compartir libertad y autenticidad, por lo tanto, trabajar junto con ellos y Marco (director creativo de la campaña) fue muy sencillo porque nos entendemos perfectamente”.
Primera mexicana en ocupar el papel principal, llega siguiendo la estela de estrellas como Rossy de Palma y Pamela Anderson, pero con su propio manual y un estilo que no pide permiso. El resultado es una serie de imágenes que han fascinado a sus seguidores: María en bici estática con un vestido de pelo, con una peluca de árbol de Navidad tamaño XXL o en la peluquería de Santa Claus luciendo un vestido-camiseta con bra joya. Y para ella, este hito tiene un significado especial: “Me siento completamente plena y muy ilusionada de que esto signifique abrir las puertas para más mexicanos en la industria de la moda en todos los ámbitos, me ilusiona mucho no ser yo, sino que seamos todos”.
Entre todas las escenas de esta campaña, hay una que grita ‘¡María Bottle!’ y ella misma lo revela. “La peluca de árbol es la que mejor captura mi esencia, durante mi vida he tenido el pelo rosa, amarillo, azul, morado, largo, corto, corto-largo, sin pelo, el cráneo tatuado, mitad de la cabeza rapada, y creo que uno de mis medios de experimentación física más grande ha sido el pelo, me gusta porque es jugar mucho con la feminidad y como es percibida en la sociedad, y como de alguna forma asusta o provoca al espectador, disfruto mucho de eso”, comparte con ELLE.
Su reacción al descubrir los looks de la campaña fue tan genuina como ella misma: “Lo que pensé fue ¡WOW! Me encanta esta colección, creo que la stylist y yo nos conectamos muy bien, me encantó sentir algo CAMP, pero además algo con lo que completamente saldría a la calle a caminar con mi perro, y una Navidad muy de salir de fiesta y amanecerla pero también ir al recalentado con la familia”.
Este espíritu también se refleja en su lista de deseos –totalmente BIMBA Y LOLA– para la temporada. “Mi wishlist sería la Coco en rosa mexicano fosfo Barragan, los vestidos de seda, la leather skirt, los aretes de osito y los zapatos puntiagudos porque siento que son como vintage-cool y a la vez tienen un vibe de duende navideño… ah y también la Coco en rojo”.
Sus fiestas decembrinas incluyen además un ritual que mezcla cariño, estilo y complicidad familiar: “Parte de mi ritual es vestirme cool en Navidad, porque me quiero ver bonita para mis primas chiquitas. No se pueden perder mi selección en el ‘ Closet de María ’”.
“Quiero que mis nietos vean estas fotos y digan que su abuela era super cool en las fiestas. Zapatos cómodos porque amo bailar, redefining hot (4 a.m. con mis amigos riendo y una party paper bag)”, añade. No sorprende que el nuevo PAPER PARTY, lleno de brillos y charms, ya esté en el top de nuestras obsesiones navideñas.
El resultado es una campaña luminosa, irreverente y cálida, tan actual como la energía que irradia María Bottle. Una Navidad donde la moda se disfruta, se juega y se vuelve parte de la historia personal. Una Navidad BIMBA Y LOLA, interpretada –y ampliada– por el universo creativo de María.