Después de permanecer algunos meses alejada de eventos públicos, Meghan Markle hace su debut en Paris Fashion Week con dos looks de impacto. La duquesa de Sussex acaparó miradas en la primera fila de Balenciaga. Acudió a la pasarela para mostrarle su apoyo a Pierpaolo piccioli, quien recientemente fue nombrado director creativo de la marca.
Para la ocasión, Meghan eligió un look blanco conformado por unos pantalones de vestir con una camisa blanca con un detalle estilo capa que le daba un toque sofisticado y elegante. Para contrastar, utilizó zapatos de punta negros y un clutch del mismo tono.