Debemos reconocer que Prada es la verdadera autoridad de la moda, una de las pocas marcas que tienen el poder de establecer tendencias y convertir productos de temporada en objetos de deseo. Desde hace unos tres años que el estilo bohemio comenzó a infiltrarse discreta y silenciosamente en la moda en forma de tendencias más pequeñas como el cottagecore y el vibe setentero.
Tras unas seis temporadas cocinándose en el horno de las tendencias, este verano se impone uno de los elementos más representativos del estilo bohemio: el crochet. También conocido como ganchillo, se trata de ese tejido de punto abierto característico de las abuelitas, y que por su carácter ligero, se ha convertido en la apuesta veraniega absoluta de Prada en una variedad de accesorios.