Demandan a Hermès por sus políticas para vender una Birkin

Las demandantes afirman que la marca parisina implementó “un plan para explotar el poder de mercado” de los bolsos Birkin para que antes de poder adquirir su producto más codiciado, sus clientes se vean obligados a comprar otros productos de la marca o accesorios de esta. Básicamente, Cavelleri y Glinoga alegan que Hermès creó “una aura de inalcanzabilidad” alrededor de este modelo de bolso que además, se vende en cifras exorbitantes.

Del mismo modo, las demandantes señalan que es muy difícil que en boutiques Hermès haya Birkins en exhibición y que usualmente, los clientes dignos de poder comprar este modelo, lo hacen en una sala privada. Además, los vendedores de la marca, solo tienen permitido ofrecer estos bolsos a clientes que ya tengan un historial de compras con la firma.

Dicho de otro modo, la demanda señala que Hermès tiene una conducta anticompetitiva de vinculación con sus clientes al obligarlos a comprar otros de sus accesorios antes de que se les permita comprar un bolso Birkin. Cavelleri y Glinoga alegan que la marca está infringiendo la Sección 2 de la Ley Sherman, que prohíbe la "monopolización de cualquier parte del comercio o la actividad comercial entre varios estados, o con naciones extranjeras".

Las demandantes también acusan a la marca de infringir en otras leyes de California, incluida la Ley Cartwright, que prohíbe la "combinación" de recursos por parte de dos o más personas para restringir el comercio o la actividad comercial, o para evitar la competencia en el mercado.