Después de pasar cinco años alejada del ojo público, la supermodel de los años 90, Linda Evangelista , de 57 años, reveló en septiembre del año pasado que se escondió todo ese tiempo porque fue víctima del CoolSculpting . Este tratamiento que supuestamente congela células de grasa localizadas, tuvo un efecto adverso que dejó a la modelo con el cuerpo y la cara abultados.
Esta técnica fue contraproducente, haciendo que sus células de grasa crecieran, desarrollara hiperplasia adiposa paradójica (PAH) y su salud mental se viera profundamente afectada. A casi un año de enfrentarse al mundo con su nuevo rostro, Linda Evangelista vuelve con coraje ante los reflectores protagonizando la nueva campaña que celebra el 25 aniversario de Fendi Baguette .