En Francia la moda es un tema serio, muy serio en términos sociales, históricos, culturales y económicos. La industria de la moda es uno de los motores de la economía de este país, generando unos 150 mil millones de euros anuales y dando empleo a un millón de personas, lo que representa el 2.7% del PIB, un sector más rentable que el aeronáutico o automotriz.
Si bien París es la capital de la moda por excelencia, el francés ya no es su lengua oficial y ha sido desplazado por préstamos lingüísticos del inglés, conocidos como anglicismos. En un esfuerzo por restituir este poder, la Delegación general de la lengua francesa ha unido fuerzas con la Federación de la Alta Costura y la Moda para crear una guía de léxico alternativo.