Cenar en La Brasserie Lutetia no es simplemente ir a un restaurante parisino, es formar parte de una historia que lleva más de un siglo escribiéndose en el corazón de la Rive Gauche. En el icónico Mandarin Oriental Lutetia, que este año cumple 115 años de ser la joya del barrio Saint-Germain-des-Prés, el tiempo se detiene para pasarla bien entre copas de vino, luces doradas y conversaciones eternas. Definitivamente un must si visitas París por primera vez, e incluso para los que han estado ahí incontables veces.
La Brasserie del Lutetia: una cena con historia en la joya de la Rive Gauche
La Brasserie Lutetia mantiene vivo el espíritu de las grandes brasseries parisinas en el corazón de la Rive Gauche.
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Desde su apertura en 1910, La Brasserie ha sido testigo de la evolución de París: de los días en que escritores y artistas ocupaban sus mesas para discutir ideas, hasta hoy, cuando locales y viajeros se toman un tiempo para sentarse a degustar lo mejor de la cocina francesa con un toque contemporáneo. Su atmósfera aún mantiene la esencia de las grandes brasseries parisinas, pero con la sofisticación moderna de Lutetia.
El chef Patrick Charvet, al frente de la propuesta culinaria de Mandarin Oriental Lutetia, rinde homenaje a la tradición con platos clásicos de la cocina francesa como una sopa de cebolla, huevos en meurette, escargots o un sole Meunière, pero también se permite jugar con las formas y texturas, creando una experiencia moderna sin traicionar lo clásico.
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Todo sucede en ese entorno artsy que caracteriza a la Rive Gauche; la luz naranja de las calles, los ventanales de estilo Art Nouveau, y la energía del barrio de Saint-Germain. Cenar aquí es revivir la historia de un hotel que fue refugio de poetas, pensadores y celebridades. Y aunque hoy el Lutetia forma parte de la familia Mandarin Oriental, su alma sigue intacta: sigue siendo el único Palace del banco izquierdo, un punto de encuentro entre el pasado y el presente de París.
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