Más que celebrar el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer, es un día en el que debemos reconocer todos los logros y progresos que las mujeres hemos tenido en la sociedad; que si bien hemos avanzando mucho en el camino por la igualdad, tenemos que ser conscientes de que aún hay un largo camino por recorrer pero nada, nada nos va a vencer.
Juntas vamos a lograr que todas seamos tratadas con respeto, que cada día que salgamos a la calle, vayamos a una fiesta, al trabajo o a cualquier lugar, regresemos a casa sanas y salvas. Sin miedo de que alguien nos esté persiguiendo. Es nuestra tarea alentar y brindarle valentía a las víctimas para que alcen la voz, porque el silencio nunca será la respuesta.
Queremos y merecemos un futuro sin obstáculos en el que los hombres sean nuestros aliados y no nuestros enemigos, por que sí, existen hombres que están de nuestro lado . Ellos y nosotras debemos enseñarle al resto que la violencia NO es una opción.
Hoy y todos los días, las mujeres luchamos y no dejaremos de hacerlo hasta conseguir un espacio en equidad, libre de violencia, un mundo en el que no tengamos que volver a decir "ni una menos".