Nosh, un pequeño rincón de Tel-Aviv pero en la Condesa: ELLE hot spot

Desde que llegas todo es una experiencia. Al interior de un edificio art decó mexicano y enclavado en el Hotel Hippodrome, te encontrarás con un elegante lugar con espejos en plata, paredes de madera, mesas de mármol y sillones de terciopelo. Una vez sentado inicia el viaje culinario.

En nuestra visita tuvimos la oportunidad de probar un menú sugerido por el chef Daniel Ovadía, quien también está a la cabeza del ya famoso Merkavá. Empezamos ligero con unos canapés; de ahí, pasamos a una entrada de hummus con falafel y zanahoria acompañada con pan árabe hecho a mano. Después, probamos una reducción de sopa de cebolla con ravioles rellenos de queso que, en lo personal, fue mi parte favorita.

Como si todavía nos quedara estómago, nos trajeron el platillo estrella: un sándwich de cordero con mostaza, sauerkraut, pepinillos y pan alcaravea. Pero, esperen, ¡las papas! Apenas las probé, su sabor entre dulce y salado me transportó inmediatamente a mi infancia cuando comía churros en la feria, solo que más rico.

Comimos tanto que lo único que nos faltó fue espacio y cada platillo fue mejor que el anterior. Ni qué decir de los drinks (pueben el de pistache). Este pequeño lugar es perfecto para pasar un buen rato en pareja, el ambiente íntimo y acogedor te permitirá tener una noche (o día) romántica y con la mejor comida de Medio Oriente. Es una propuesta muy diferente a la que eligirías normalmente, pero que definitivamente vale la pena probar.

ELLE tip: te recomendamos ir con hambre porque los platillos son todo menos pequeños y si quieres, pueden compartir para que prueben de todo un poco.