Pasar casi un año encerrados en casa cambió por completo nuestra perspectiva del mundo, incluyendo nuestra relación con la moda, llevándonos a priorizar el factor comodidad . Durante el confinamiento, el panorama no lucía muy alentador, los expertos en tendencias aseguraban que los pants habían llegado para quedarse y serían la prenda básica de la “nueva normalidad”.
El futuro de la se veía tan incierto, que incluso Anna Wintour se dejó ver en pants (imagínate), pero citando al irreverente Karl Lagerfeld : “Los pants son un signo de derrota. Has perdido el control de tu vida y te has comprado unos pants”, ahora podemos decir que no nos dejamos derrotar por la pandemia y los pants; los trajes están de regreso, pero ahora en versión cómoda.