La riqueza cultural de nuestro país se manifiesta a través de su trabajo artesanal. Técnicas ancestrales que son reflejo de nuestras tradiciones. Pero en muchas ocasiones, nos preocupa que el incluir artesanías en nuestra decoración termine creando un ambiente rústico. Incluir elementos artesanales en nuestros espacios no tiene por qué alterar nuestro estilo siempre y cuando sepamos cómo hacerlo. Para esto, es importante tomar en cuenta dos opciones: utilizar piezas o técnicas y que deseamos lograr en la decoración.
Piezas statement
Si lo que buscas es crear acentos visuales en la decoración lo ideal será encontrar piezas que se destaquen del resto. Por ejemplo, sí tienes una decoración minimalista con una paleta de colores en grises, el trabajo de artesanos huicholes podría quedar muy bien sobre algún muro. En un comedor de madera oscuro, como la parota, el montar una vajilla de talavera creará un interesante acento. El trabajo de madera tallada de artesanos zapotecas como Jacobo y María Ángeles , está lleno de color y simbología. En este caso podrías integrar algunas piezas en tu mueble modular convirtiéndolo en protagonista de tu espacio.
En caso de buscar que la pieza se integre de manera armónica al entorno, puedes optar por trabajos de un solo material o color. Una paleta en tonos negro y blanco puede ser complementada con piezas de barro negro de Oaxaca. Los jarrones y macetas de barro horneado son excelentes piezas para exteriores y se integran muy bien con la vegetación.
Si deseas integrar más de un tipo de artesanías y cuentas con el espacio suficiente, puedes aplicar la museografía en tu hogar. En un pasillo o en áreas comunes, coloca mobiliario simple que funcione como estantería, dejando las piezas a altura de vista. La iluminación dirigida dará un mejor resultado.
Técnica
Son muchos los artesanos, diseñadores y artistas que buscan integrar la técnica artesanal no solo de manera tradicional. Experimentando con aplicaciones en el diseño interior y en diferentes accesorios. Un claro ejemplo son los bordados tehuanos u otomís. Comenzaron en algunas etnias como acabados en la vestimenta y actualmente son empleados en blancos, mantelería y cojines. Suelen ser muy coloridos por lo cual pueden funcionar como acento visual. En una habitación de tonos neutros incluir cojines, pie de cama o alguna cobija con este tipo de bordados dará vida al espacio.
La cestería ha pasado de cumplir sólo un propósito funcional a ser parte de nuestros espacios. Colocar una cesta de alguna fibra vegetal en el cuarto de entretenimiento con frazadas dentro, resulta en un toque acogedor. También pueden ser utilizadas como pantallas de luminaria, en materiales como vara o carrizo.
El cobre golpeado de regiones como Santa María del Cobre, ahora se emplea en la creación de mobiliario y decoración. Desde pantallas para luminarias, hasta esculturas e incluso lujosas tinas de baño. Y aunque en otros países era ya popular el uso del cobre en mobiliario, en el nuestro es una tendencia que va en ascenso, y que jóvenes creativos han empleado de manera magistral.
Existen un sinfín de artesanías tan sólo en México. Atrévete a experimentar con tus espacios, a valorar el trabajo de los artesanos y atesorar piezas con alto valor cultural.