Han pasado varios meses —sobre todo desde que la Princesa de Gales anunció en enero de 2025 que había sido diagnosticada con cáncer— en los que cada aparición de Kate Middleton ha sido analizada al detalle. Por eso, cuando acudió a Balmoral el 24 de agosto para un servicio religioso en Crathie Kirk, la luminosidad de su pelo no pasó desapercibida y acaparó todas las miradas.
Hasta ahora fiel a su castaño intenso, Kate Middleton reveló un tono visiblemente más claro con reflejos dorados. Este cambio, tan discreto como impactante, parece simbolizar no solo una actualización en su estilo, sino también un nuevo capítulo en su vida pública.