Mientras tanto, Zion y Belinda siguen discutiendo si ella debería aceptar el dinero para callar que Greg está ofreciendo. Zion la convence de que finalmente podría usar esa riqueza para abrir el spa de sus sueños. Ella acepta reunirse con Greg solo para saber cuánto podrían conseguir. Zion, que por cierto está estudiando un MBA, se luce en la negociación, diciéndole a Greg que su madre merece 5 millones de dólares por su negocio y su paz mental. Belinda se levanta y se va, pero era solo una estrategia para hacerle pensar que realmente abandonaría el trato. “Él quiere que tengamos miedo, pero tenemos que hacer que sea él quien tenga miedo, ¿ok?”, dice. Zion regresa para cerrar el trato. Más tarde esa noche, descubrimos que no lo logró. Greg está pensándolo, pero Zion ya le dio el número de cuenta y ruta bancaria de Belinda para cuando se decida. (¿Una jugada un poco loca y confiada tratándose de un hombre peligroso???)
Laurie finalmente se reúne con sus amigas para cenar, durante la cual les cuenta que se fue a casa con Aleksei. Aunque se rompe un poco el hielo entre las tres, vuelven a sus fachadas falsas: Kate dice que se ha sentido “floreciendo” toda la semana y Jaclyn que ha estado en una nube. Laurie se sincera: "Toda la semana he estado tan triste". A medida que envejeces necesitas justificar tu vida y tus decisiones, dice. Cuando está con sus amigas, todos sus errores se vuelven evidentes. Ha intentado encontrar sentido en el trabajo, la maternidad y el amor, pero se dio cuenta de que, después de todos estos años, el tiempo le da sentido a su vida. "Comenzamos esta vida juntas… y las miro y eso se siente significativo", les dice entre lágrimas. Le encanta que compartan una historia juntas, y que incluso si están hablando de tonterías junto a la alberca, hasta eso puede sentirse profundo. Cree que, aunque estén resolviendo sus vidas juntas, ama los defectos de sus amigas y aquello que les causa inseguridad—en el caso de Jaclyn, su rostro; y en el de Kate, su vida perfecta. ¡Esto era lo que necesitaban desde el inicio: honestidad! Se susurran “te amo” entre ellas y acuerdan bajar la guardia. Ah, y Carrie Coon, tu Emmy te espera.
En otra mesa, Chelsea y Rick cenan juntos y celebran el hecho de que él por fin es “libre”. Ella le habla del concepto de “amor fati”, que debes abrazar tu destino, sea bueno o malo. Añade, de forma bastante ominosa: “Si algo malo te pasa a ti, me pasará a mí.” Cree que estarán juntos para siempre. Rick dice: “ese es el plan.” Chelsea se conmueve hasta las lágrimas. ¡Protejan a esta mujer!