Gisèle Pelicot, la mujer que podría cambiar las leyes en Francia

Gisèle descubrió la verdad de la peor manera, cuando encontró videos de los ataques en la computadora de su esposo grabados por él mismo. Poco después, Dominique confesó la verdad, admitiendo que la había drogado para coordinar estos abusos con hombres desconocidos; a lo que, mostrando una inmensa valentía, decidió presentar cargos.

No obstante, aún con las pruebas, más de 35 de los acusados negaron la responsabilidad, argumentando que creían que "ella había consentido o que fingía dormir" mientras sucedía el acto sexual. Como era de esperarse, este argumento ha cuestionado profundamente el sistema legal francés, donde la definición de violación no contempla el consentimiento como elemento clave, desatando un debate sobre la urgente necesidad de reformar la ley para proteger a las víctimas de manera efectiva.

Francia frente a un cambio legislativo crucial

Por fortuna, el caso Pelicot se viralizó en cuestión de días y, ahora, resuena tanto en redes sociales como en las calles, donde millones de personas apoyan a Pelicot por su admirable fortaleza; pues, al contrario de lo que esperaban, la mujer optó por un juicio público, enfrentándose a sus agresores y exponiendo su historia para, tal como ella misma lo afirmó frente a la prensa, "representar a todas las víctimas de abuso que buscan ser escuchadas".

Pero un movimiento social no es lo único que Pelicot está causando. El juicio también ha impulsado a destacados políticos, como el ministro de Justicia Didier Migaud y al presidente Emmanuel Macron, a pronunciarse a favor de una reforma que incluya el consentimiento en la definición de violación, una estipulación que, hasta el momento, no existe en la constitución francesa.

“He decidido no avergonzarme, no he hecho nada malo”, declaró Gisèle en el tribunal, luego de que presentaran las primeras pruebas en video el pasado miércoles 23 de octubre. Hasta el momento, el juez no ha emitido el veredicto; sin embargo, esta semana el juicio se reanuda con más pruebas y acusados.

No obstante, es importante declarar que la decisión de Pelicot de luchar y visibilizar su caso ha inspirado a muchas otras mujeres, fortaleciendo el cambio de esas leyes que no protegen a quienes sufren violencia sexual.