Luego de que hace unas semanas, el príncipe Harry, Meghan Markle y Doria Ragland estuvieran involucrados en una persecución de paparazzi que pudo terminar en un accidente, se da a conocer que el duque de Sussex perdió la batalla legal en la que exigía al gobierno de Inglaterra que le diera equipo de seguridad para que él y su familia estuvieran protegidos cada que visitaran el Reino Unido.
El Tribunal Superior de Londres y el juez Justice Chamberlain le negaron al príncipe Harry la “oportunidad de buscar una revisión judicial” para que el gobierno británico le dé acceso a tener seguridad de policía local, a pesar de que él se encargaría de los gastos.