Camila Cabello es portada de ELLE México y habla de su amor por México y Cuba

Alan Gobe (AG): ¿Prefieres que hablemos en inglés, español o Spanglish?

Camila Cabello (CC): I mean, tengo más vocabulario en inglés, pero puedo hablar Spanglish también.

AG: Perfecto, ¿qué tal estuvo la sesión de fotos?

CC: ¡Me encantó el shoot! La estilista es una mexicana que trajo mil opciones de diseñadores. La moda me interesa cada vez más.

AG: ¿Cuándo empezaste a ser consciente de la ropa que usas y la manera en la que te quieres proyectar?

CC: Cuando empecé mi carrera en esta industria tenía más o menos quince años, y en esa época no me importaba lo que usaba, iba de un lado para el otro e inmediatamente después tuve una estilista que me decía cómo vestirme. Para ser honesta, siempre he sabido lo que me gusta y lo que no, pero el año pasado, cuando estaba sola en Brooklyn escribiendo para mi nuevo álbum, comencé a expandir mi mente y probar nuevos estilos con el maquillaje, el peinado y hasta seguir a diseñadores de moda en Instagram. Me enamoré de las tiendas de ropa vintage, lo que me inspiró a querer adornarme y me devolvió mi amor por la moda.

AG: Eso se nota en tu video “Don’t Go Yet”, creo que hay un glow up. Visualmente se siente todo mucho más atractivo; los colores, la ropa, los movimientos...

CC: Esa fue la primera vez en mi vida que sentí que me convertí en adulto, probé diferentes sombreros para ver cuál me quedaba mejor, cuál se sentía más como me siento. Gran parte es porque quiero conectar con todo lo que soy; con mi familia y mi cultura. Los colores en “Don’t Go Yet” y de este nuevo álbum son vivos como nuestra cultura. Todos estos nuevos aspectos provienen de mí queriendo saber quién soy y quién quiero ser.

AG: Me encanta que hables sobre el tema cultural. Escuché algunas canciones de Familia y se siente muy natural que cantes en inglés y en español, porque es parte de ti.

CC: Soy una inmigrante que llegó a Estados Unidos cuando tenía siete años, crecí con un papá mexicano y una mamá cubana, lo que me hizo sentir en medio. El fuerte lazo que tengo con mis culturas mexicana y cubana me hace sentir que tengo un hogar y eso me inspira. Mientras más maduro más quiero estar en esos lugares rodeada de mi gente y aprender más sobre las culturas que están presentes en mí.

AG: Personajes como Michelle Obama cuando era la primera dama de Estados Unidos, por ejemplo, vestía moda de diseñadores de su país. Lo mismo hace Brigitte Macron, como símbolo de apoyo. ¿Quieres hacerlo igual con la moda mexicana y cubana?

CC: Ya había empezado a trabajar en eso con mi estilista, pero ahora que me he acercado más a la moda me interesa apoyar a la gente que me gustaría ver triunfar, y los latinos son esa gente, están en mi corazón y son parte de mi cultura. Quiero apoyarlos y dar visibilidad al talento que existe, a los diseñadores cubanos y mexicanos. Eso me emociona mucho.

AG: Hay una teoría que dependiendo del idioma que hablas, tu personalidad cambia, en parte porque hay una cercanía y conexión emocional con los idiomas. ¿Sientes algo parecido?

CC: Definitivamente me siento así. Cuando hablo en español salen las partes jóvenes de mí, las que están en mi subconsciente desde que nací hasta que viví en Cuba y México. Es mi versión más infantil e inocente, antes de las luchas y los enfrentamientos con los problemas de salud mental y todo lo que conlleva crecer. Desde el año pasado intento leer y ver más series en español, pasar más tiempo con ese lado mío, la parte intacta de mi personalidad, como cuando un niño conoce solamente alegría y felicidad. *Suena el señor de los tamales* “Oh my gosh, qué rico”, dice Camila.

AG: Antes si un artista latino cantaba en inglés parecía que había logrado el éxito y ahora muchos artistas anglosajones están cantando en español. ¿Por qué crees que se ha suscitado este cambio?

CC: Para mí escribir en español tiene que venir de querer crear una conexión auténtica con la gente. Después de “Havana” muchos querían colaborar conmigo, de repente querían que hiciera música en español, creían que iba a vender más porque es hot, pero yo me opuse. Esta fue la primera vez que sentí que debía ser en español. No sabía que iba a crear un disco inspirado en la música latina, se suponía que iba a ser música pop, pero al encontrarme con Edgar Barrera (compositor) y Cheche Alara –el productor con quien hice “Bam Bam”–, se sintió natural. Nos sentimos conectados a través de la música y para mí se trataba de crear música latina con gente de origen latino.

AG: ¿Por qué tu disco se llama Familia?

CC: Recuerdo estar viendo el Tiny Desk de C. Tangana donde hay una mesa con gente alrededor, como una cena festiva, y me dije a mí misma: “eso es lo que quiero en mi vida”. En esa época me nació cocinar e invitar a gente a mi casa, empecé a ser una persona más sociable, porque antes era muy introvertida. Quería que esa etapa de mi vida fuera de grandes amistades, de ser cercana con las personas con las que estoy haciendo el álbum. Esa fue una razón para el nombre, y por otro lado, mi familia de sangre que es una gran parte de quien soy.

AG: Escuché “Bam Bam”, “Lola”, “Buena vida” y “Hasta los dientes”. Me parece que cada una habla sobre el amor de una manera muy específica y diferente.

CC: Escribí sobre las cosas que estaba viviendo en ese momento. “Hasta los dientes” fue una de las primeras canciones, luego “La buena vida” y “Bam Bam”. De verdad fue una evolución de mis sentimientos y de mi vida. Lo bueno es que pude tomarme el tiempo de hacerlo y escribirlo en un periodo de un año y medio, donde estaba en una relación y luego ya no. Escribí sobre eso y las diferentes experiencias. Si hubiera escrito una canción cada día por un mes, probablemente todas esas canciones se hubieran parecido porque mi vida no estaba cambiando tanto.

AG: Exactamente eso se siente, no solo en la letra sino en la música, son muy diferentes. “Lola” se siente misteriosa mientras que “Bam Bam” más divertida y llena de vida.

CC: Lola se escribió mientras ocurría el movimiento de San Isidro en Cuba. Se la puse a mis coreógrafos y me dijeron que se sentía muy sexy. La letra habla sobre una chica que es increíblemente inteligente, talentosa y con mucho potencial, pero que no puede hacer nada con su talento porque vive en un país que la censura y no le da oportunidades. Contacté a Yotuel, quien fue parte de la canción “Patria y vida”, que homenajea a este movimiento donde las personas protestaban en las calles de Cuba en contra de la dictadura que ha existido durante mucho tiempo. Él escribió su parte de la canción y me la envió, hablamos sobre la realidad de un país hermoso que han querido destrozar.

AG: ¿Crees que tu música es para empatizar con la gente y contar historias sobre lo que los demás viven y sienten, y de esa manera conectar con otros?

CC: “Lola” es diferente porque ese día en particular supongo que estaba en el estudio pensando sobre esa situación en mi vida, y lo diferente que hubiera sido si me hubiera quedado allá. Esa canción viene de un lugar para intentar entender cómo es la vida allá, pero en realidad mis canciones son para hacerme sentir mejor, me pregunto cómo me siento y empiezo a crear. Es procesar y alquimizar mis sentimientos.

AG: ¿Qué canción de Familia es la más cercana a tu corazón?

CC: “Psychofreak” porque es en donde me sentí más vulnerable y expuesta. Me sentía muy ansiosa en el estudio y de repente improvisé una letra. Recuerdo sentirme terrible y avergonzada cuando terminé ese día, pero también con miedo por abrirme de tal forma y hablar sobre eso. Al final terminó siendo de mis favoritas porque desnudé mi alma.

AG: ¿De qué habla la canción?

CC: Hablo mucho sobre mi ansiedad en cuanto a las relaciones, sobre la lucha de intentar estar presente a pesar de sentirme paranoica o insegura. En ese entonces, estaba con una persona que me amaba, pero tenía miedo y vergüenza por tener miedo. Fue difícil hablar de eso porque en ese entonces no hablaba mucho sobre mi ansiedad. En esa canción están los pensamientos más locos y profundos que tengo cuando se trata de estar en una relación con alguien.

AG: ¿De dónde crees que viene tu pasión por la música?

CC: No lo sé, definitivamente siempre ha sido mi pasión. Recuerdo escuchar música obsesivamente y cantar todo el tiempo. Siempre cantaba en mi cuarto, mi papá y mi abuela aman la música, supongo que viene de ahí, pero es indescriptible, la música es todo para mí. Puedo sentirme feliz y tener una conexión con otras cosas, pero no de la misma forma. Con la música tengo una conexión única.

AG: Como esta idea de los ocho diferentes amores: el romántico, el afectivo, el erótico, y hay uno que se llama ágape o amor incondicional, el tipo de amor al que la gente aspira porque es el más completo. ¿Sientes que ese es el amor que le tienes a la música?

CC: Eso que dices es muy bonito y creo que es verdad. La gente que me conoce sabe que es lo que más me gusta, para mí la música es sagrada. Todo lo que quiero hacer es crear, ser honesta conmigo misma, sentir que me estoy expresando, que estoy creciendo como artista y que me estoy retando. No lo haría solo por vender, en este momento de mi carrera estoy muy segura de lo que quiero en la vida y lo que es importante para mí. La música es la relación más sagrada para mí, todo lo que me pide es que sea honesta, y si lo soy, lo que recibo es magia.

AG: Y cuando eres honesto contigo mismo todo se acomoda, ¿no?

CC: 100%

AG: ¿Aparte del lanzamiento de tu nuevo disco qué más esperas del 2022?

CC: Me emociona la idea de viajar más, de hecho me gustaría pasar más tiempo en México, lo platicaba con la stylist en el shoot hoy. Quiero estar y sentirme más presente en la vida, vivir “Bam Bam”.

Créditos de historia de portada

Modelo: Camila Cabello
Fotos: Sasha Samsonova
Entrevista: Alan Gobe
Estilismo: Jessica Gutiérrez
Producción: The Gold Horse para ELLE México
Maquillaje: Patrick Ta
Pelo: Simmitris Giannetos
Uñas: Shigeko Taylor
Digi Tech: Justin Hissey
Asistente de moda: Cindy Ayala
Asistente de foto: Bryan Carvajal
Asistente de maquillaje: Akina Shimizu
Asistente de pelo: Lily He
Productora ejecutiva: Dalit Gwenna
Productora: Chaz Pilarcik
Coordinadora de producción: Sierra Benhoff
Locación: Myron Palms
Editora General: Claudia Cándano