Al recibir a Archie, Meghan y Harry rechazaron el título de príncipe que le correspondía al pequeño. Poco tiempo después del parto, hicieron pública su salida de la familia real para ser independientes y posteriormente, se mudaron a Estados Unidos. Así que muchos están relacionando esta decisión de Eugenia como un paso a la independencia.
Al final, ya vimos que dejar el Palacio y dejar de ser miembros de familia real no tuvo consecuencias económicas para Meghan y Sussex, quienes actualmente tienen residencia en Los Ángeles .

"Aunque la reina les ofreciera un título real como regalo, no es el deseo de Eugenia y Jack que su hijo tenga uno", expresó una amistad cercana a la pareja a la revista Vanity Fair . La pareja real si tiene planeado criar a su bebé en el palacio de Kensington. Pero no quieren que tenga un título real, pues buscan que sus hijos tengan una vida normal.
Con su experiencia y una vida bajo los reflectores por su título, la princesa considera que este cargo es como una “maldición”. “Eugenia sabe que un título puede ser tanto una maldición como una bendición, y ella y Jack quieren que su hijo lleve una vida normal y, finalmente, trabaje para ganarse la vida”, expresó la persona a VF.