Desde que renunciaron a la realeza, la pareja ha estado por todos lados. Primero dejaron el Reino Unido para instalarse en Canadá, donde supuestamente llevarían una vida más tranquila y alejada de los reflectores. Posteriormente optaron por L.A. donde vivieron en una gran villa toscana que no le pide nada a un palacio.
Así aparecieron en la reunión por Zoom para un evento de la fundación de Queen's Commonwealth Trust. Meghan, con un vestido blanco y negro sin mangas, y Harry, complementando con una camisa blanca, se sentaron en lo que parece ser una habitación de su finca en Santa Bárbara, dando a los fans una pequeña vista de su nuevo hogar.

La zona donde viven, Montecito, es conocido por ser el lugar de los millonarios de L.A., situado entre las montañas de Santa Ynez y el Océano Pacífico. De acuerdo con los registros de propiedad, la pareja compró la casa de 14.500 pies cuadrados por $ 14,65 millones de dólares. Supuestamente sacaron una hipoteca de $ 9,5 millones. Los detalles de la mansión describen que hay una cancha de tenis, una piscina, una casa de huéspedes, jardines de rosas, cipreses y olivos.