En este punto, Jamie ya estaba molesto, pero continuó hablando más sobre el movimiento viral. "La gente está siendo acosada y atacada con amenazas de muerte. Es horrible. No queremos ese tipo de fans. Amo a mi hija", continuó. "Amo a todos mis hijos. Pero este es nuestro negocio. Es privado."

Hay cuentas en Instagram dedicadas a #FreeBritney . En ellas publican razones por las que creen que Britney está siendo manipulada por su papá y por su equipo. Así como creen que este arreglo legal ha servido a Jamie y los abogados para enriquecerse a costa de la cantante. Los fans piensan que la intérprete de ‘Toxic’ manda señales con las fotos y los videos que publica en Instagram. Además el movimiento tiene una petición en change.org que ha ganado más de 100 mil firmas.
"Su padre no le permite conducir, todas sus llamadas y mensajes son monitoreados, no se le permite votar, salir con nadie o gastar su dinero sin permiso. Y si rompe una regla, amenaza con llevarse a sus hijos", lee la petición.