La presentadora de 62 años envió un memo a todos su empleados en el que se lee: "Hola a todos, soy Ellen. En el primer día de nuestro programa, les dije a todos en nuestra primera reunión que Ellen DeGeneres Show sería un lugar de felicidad – donde nadie jamás alzaría su voz, y todos serían tratados con respeto. Obviamente, algo cambió, y me decepciona saber que este no ha sido el caso. Y por eso, lo siento. Cualquiera que me conozca sabe que es lo contrario de lo que yo creo y lo que esperaba para nuestro show".

A principios de esta semana, Variety informó que Ellen había enviado un memorando a sus empleados que decía que tras las acusaciones que había recibido el programa y ella, se realizaría una investigación interna.