Hay tres puntos clave para una piel súper dewy que se vea perpetuamente luminosa. El primero es utilizar productos en crema o líquidos para que el acabado sea más natural; el segundo, olvidarte de los acabados mate, aquí lo único que buscamos es luminosidad o, al menos, neutralidad y el tercero y último, apostar por las fórmulas duraderas y glowy. Te decimos cuáles son las mejores.