Cuando se trata de limpieza y cuidado corporal todos nos ocupamos de nuestras manos, pies, cara, brazos, cuello y piernas, pero se nos olvida que también tenemos ombligo y que es muy importante mantenerlo limpio.
Aunque a simple vista es totalmente inofensivo, pero resulta que el ombligo es una de las partes de nuestro cuerpo donde más se resguardan y reproducen bacterias y hongos. Si no te lo limpias, puede haber malos olores e incluso infecciones.