Todo parece indicar que Kim Kardashian está obsesionada con la colección Irere que McQueen presentó en la primavera de 2003. Para el after party de los Oscar 2020, la estrella de reality llevó el icónico vestido “oyster”, y ahora, cinco años después, vuelve a apostar por un diseño de la misma pasarela. Y no lo usó en una alfombra roja ni en un evento de Hollywood, lo utilizó para sumergirse en la noche en el mar de Rio de Janeiro, Brasil.
El vestido en color nude presenta tirantes trenzados, un corpiño tipo corset con pliegues y una falda desgarrada. En la industria de la moda es conocido como "shipwreck", que en español quiere decir: "restos de un artefacto o nave fabricado por el ser humano, hundido total o parcialmente en una masa de agua". Por lo que nos hace sentido que Kim Kardashian lo haya usado para un shoot en el mar.