Por sexto año consecutivo Jean Paul Gaultier celebra una de sus festividades favoritas, Día de muertos, y como locación eligió el icónico Museo de Arte Popular, en donde se montó el Mercado Gaultier. Entre montones de flores de cempasúchil, papel picado y los icónicos torsos de sus fragancias, todo se sentía como el encuentro perfecto de nuestra cultura y el toque atrevido de Gaultier. En esta gran instalación del Mercado Gaultier, diversas artesanas mexicanas exhibieron su increíble trabajo, se bailó al son de la música regional y la cena estuvo a cargo del chef Daniel Ovadía, lo que hizo que la instalación se sintiera viva.
El patio central del MAP fue el corazón de todo. Una ofrenda impresionante con flores de papel maché, velas escamadas y alebrijes se apoderaron del espacio, mientras que las botellas de perfume de Gaultier intervenidas se convirtieron en el centro de atención de lxs invitadxs.
