Los desfiles de Alexander McQueen siempre han sido de lo más aplaudido en la moda. Era una época, y un diseñador, que realmente daba un performance artístico para presentar una nueva colección. Uno de los desfiles más aplaudidos es el de Londres 1998 donde en el centro del escenario habían dos robots industriales y una bailarina con un vestido blanco sobre una platfaorma que giraba, mientras la rociaban con pintura de spray en negro y neón. El shock y la emoción del momento de todos los asistentes fue tanto que el performance se quedó grabado como uno de los momentos históricos de la moda.
Nadie estaba haciendo lo que McQueen en los 90. De manera que esa pasarela se quedó grabada como uno de las mejores de la historia. Pero alguien no la pasó nada bien ni antes, ni durante el desfile y se trata de Gisele Bündchen. La supermodelo contó en una nueva entrevista que participar en esa pasarela fue traumático para ella por esta razón.