Desde 1990, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) han incrementado en un 50%, pero las emisiones crecieron más rápidamente entre 2000 y 2010, en comparación con las tres décadas anteriores; un ritmo alarmante que ha puesto la sostenibilidad en el centro de atención de la firma italiana Salvatore Ferragamo, que está tomando acciones concretas para mitigarlas.
La sostenibilidad es satisfacer las necesidades del presente sin comprometer a las generaciones futuras, un concepto que en los últimos años la empresa florentina ha implementado con una serie de iniciativas y certificaciones medioambientales, pero ahora sube su apuesta por la sostenibilidad con la ambiciosa meta de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 42% para 2029.