Un viaje al alma del mezcal

Clase Azul México celebra la riqueza cultural de nuestro país a través de un portafolio de mezcales que rinden tributo a tres regiones emblemáticas.

Presentado por Clase Azul México


UN NUEVO CAPÍTULO

El mezcal es espíritu libre, herencia y ritual. En manos de Clase Azul México, se convierte en un emblema de lujo que conecta con la esencia de cada territorio. Tras el lanzamiento de su más reciente entrega, la marca revela un portafolio que rinde homenaje a tres regiones únicas: San Luis Potosí, Durango y Guerrero.

NACIMIENTO DE UN ÍCONO

San Luis Potosí es la más reciente joya de la colección. Elaborado con agave verde (Agave salmiana), este mezcal refleja siglos de tradición comunitaria. Su perfil aromático combina notas de caramelo, chile verde y flores silvestres, mientras que su paladar con embocadura herbal guarda un retrogusto mineral y especiado. La licorera, teñida de rojo, honra a los huachichiles, tribu que marcó la historia de la región con símbolos tan vivos como el pinzón de cabeza roja y los paisajes desérticos que inspiraron su arte


SUSURROS DEL SUR

Guerrero revela su faceta más mística y floral del mezcal. Proveniente del agave papalote (Agave cupreata), se distingue por aromas de toronja, romero, flor de margarita y tonos tostados. En boca, se transforma en un paladar vibrante con toques de limón, madera fresca y un susurro de tabaco. Su tapón, decorado con colibríes hechos a mano con técnicas de laqueado, es un homenaje al espíritu de libertad y a los artesanos guerrerenses.


LA FUERZA DEL NORTE

Durango aporta carácter al portafolio. Nacido en las sierras del norte, este mezcal de agave cenizo (Agave durangensis), despliega un perfil cristalino y de gran cuerpo. Su proceso ancestral en pozos excavados, donde el agave se tuesta lentamente con leña y piedras volcánicas imprime un carácter ahumado, mientras que sus notas de romero, cítricos y especias evocan la fuerza de la tierra. La licorera se corona con un tapón creado a mano con aplicación de cuentas de colores, una pieza artesanal con color y geometría.


MÁS QUE DESTILADOS

Cada mezcal es una expresión de la diversidad cultural de México. Las licoreras, concebidas como piezas de arte, dan vida a un universo donde el diseño, la herencia y el lujo conviven. Clase Azul México también fortalece este compromiso al preservar el legado artesanal en comunidades de todo el país.

UN HOMENAJE A MÉXICO

El portafolio de mezcales de Clase Azul no es solo una colección: es un viaje sensorial por la geografía, la memoria y la identidad mexicana. Una invitación a redescubrir la riqueza de nuestro país en cada sorbo, donde tradición y sofisticación se encuentran en perfecta armonía.