Dos activistas arrojaron sopa a la pintura de Los Girasoles de Vincent Van Gogh en la National Gallery de Londres. Esto como protesta ante el cambio climático, específicamente, su protesta es contra el uso de los combustibles fósiles. Después de arrojar la sopa de tomate, ambos protestantes se pegaron a la pared debajo de la pintura y marcaron sus manos en el muro alrededor de la obra.
Las protestantes pertenecen a una organización llamada Just Stop Oil. En un primer informe, la policía del museo detalló que dos activistas lanzaron una sustancia sobre el cuadro de Van Gogh. Ambos han sido arrestados por daños criminales y allanamiento agravado, comentó Scotland Yard. El video se ha hecho viral y la elección de tirar sopa tiene un significado en la protesta.