Para sus legiones de fans, Timothée Chalamet es nada menos que perfecto. Tiene un cabello digno de comercial de shampoo, la proporción ideal entre delgadez y músculo y, por supuesto, una piel impecable. El club de superfans Club Chalamet lo dijo alguna vez en X: "Tiene 28 años con cara de bebé y arrugas naturales cuando se ríe y gesticula. No necesita bótox en ese rostro naturalmente guapo". Pero su coprotagonista en Marty Supreme , Gwyneth Paltrow, tenía algunas sugerencias para “mejorarlo”.
Cuando Paltrow vio la piel de Chalamet en el set, la fundadora de Goop decidió darle al ahora actor de 29 años un sabio consejo de cuidado de la piel, pues notó lo que creyó eran cicatrices de acné. Podrías pensar que recomendaría una crema o un peeling —quizá incluso su propio Microderm Instant Glow Exfoliator. Pero, aparentemente, Paltrow consideró que las supuestas cicatrices estaban demasiado avanzadas para solucionarlas con un tratamiento tópico. Fue directo a lo más intenso y le sugirió un procedimiento estético que implica pasar cientos de diminutas agujas por su delicado rostro. “Le dije: 'Sabes, puedes hacerte microneedling para eso'", contó en el episodio del martes del pódcast The Run-Through with Vogue.