Después de un encuentro súper reñido, los Chiefs de Kansas City ganaron el Super Bowl LVIII y Taylor Swift bajó de inmediato a la cancha para felicitar a su novio, Travis Kelce. La pareja nos regaló el momento por el que básicamente vimos el partido (además del medio tiempo).
Durante las casi cinco horas que duró el Super Bowl entre los Chiefs de Kansas City y los 49ers de San Francisco, Taylor Swift no quitó la mirada de la cancha, y en específico, de su novio. La vimos emocionada y a momentos, muy nerviosa, pero siempre apoyando a su novio.
Una vez que la última jugada de Patrick Mahomes coronó a los Chiefs, Swift bajó a la cancha y mientras el equipo se apoderó del estrado y dedicó unas palabras a los fanáticos, la cámaras captaron a la cantante diciéndole a la distancia a Kelce: "Estoy muy orgullosa de ti". Finalmente, se pudieron reunir y sellaron la victoria con el beso y abrazo que todos los swifties esperábamos ver:
El poder de Taylor Swift en el Super Bowl
De lo que no nos queda duda, es de que en esta edición, muchas personas sintonizaron el partido exclusivamente para ver a Taylor Swift. Algunas televisoras incluso enfocaron a la cantante mucho más veces que a otras celebridades que se encontraban en el estadio. Con esto, nos queda claro que la intérprete de "Blank Space" le está generando millones de ganancias a la NFL. Recientemente se informó que para esta edición, el interés de los estadounidenses en el juego aumentó alrededor de un 169% con respecto al año pasado. No nos extrañaría, si este Super Bowl rompe récords y se convierte en el más visto de la historia.
La ganadora al Grammy disfrutó del partido desde una suite VIP acompañada por los familiares de Travis Kelce y por sus amigas, Lana del Rey, Ice Spice y Blake Lively.